¿Cómo equilibrar el aspecto personal y el profesional en las redes sociales?


Conforme la influencia de Twitter como plataforma social y canal de comunicación para las empresas ha crecido, también ha evolucionado la manera en que la gente interactúa en ese ámbito y en el resto de las comunidades virtuales. Esto ha sido un cambio sutil, pero muy importante. La pregunta es: ¿cómo equilibrar el aspecto personal y el profesional en las redes sociales?
En primera instancia, puedes tener una mezcla de ambos, ya que en esencia esa es la verdadera oportunidad que brindan estas plataformas, ¿no es así? Después de todo, las personas hacen negocios con personas, no con edificios sin alma y sin rostro.

Define quién eres como emprendedor
¿Cuál es tu punto de vista como profesional de los negocios? Piensa en un panorama más extenso –una perspectiva más amplia– que represente quién eres. 

Ésta puede ayudarte a discernir qué contenido compartir y en qué conversaciones participar en Twitter, LinkedIn, Facebook, etc. También puede orientar tus esfuerzos por hablar un poco acerca de ti, más allá de lo que hace tu empresa, y dar a tus seguidores una noción de quién eres.

Comparte el porqué, no sólo el qué
Más que postear: “Pasé el día leyendo” (aburrido); intenta con: “Pasé el día leyendo el nuevo libro de David Sedaris. ¡Buena forma de desconectarse luego de una semana de mucho trabajo!” (esto ofrece contexto y da una idea sobre tu carácter). 

La recomendación aquí es no asumir el rol de vendedor a partir de lo que compartes. Fíjate cómo el ejemplo no contiene frases como: “Ordenen hoy: www.nolohagas.com”. Eso no es compartir, es un comentario promocional. Recuerda que estás construyendo relaciones, no administrando un canal de marketing directo. Ofrece orientación por medio de tu experiencia y tu personalidad. Comparte o resuelve, no te la pases promoviendo lo que vendes.

Personalizado pero no personal
Las plataformas sociales representan una oportunidad para mostrar más de los individuos que hay detrás de una marca. Lo anterior significa mostrar que eres un ser humano real, con sangre de verdad corriendo por venas de verdad. Al final, tienes un punto de vista, una personalidad. Por ejemplo, una cosa es mencionar que no te sientes bien; eso es personalizar. Otra, muy distinta, es que tienes un molesto sarpullido en un sitio muy sensible.
Vía  ||  soyentrepreneur


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